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Cienfuegos (1819-1902)
Ya es posible enterarse con rigor sobre la historia de la masonería en Latinoamérica. Este libro, del historiador cubano Samuel Sánchez Gálvez, de la Universidad de Guayaquil (Ecuador), entrega al curioso y al estudioso una investigación modélica sobre cómo se puede y debe obligatoriamente escribir la historia no solo de la masonería, puesto que es el foco que aquí ilumina, sino de la historia en general, independientemente del terreno analizado.
La masonería cienfueguera, en sus inicios, se vio inmersa en contradicciones internas dada la composición de los miembros de las logias Asilo de la Virtud, con una fuerte presencia española, y Fernandina de Jagua, con una mayoría de cubanos. En medio de esas diferencias surgieron en la ciudad otras logias, pero su funcionamiento fue corto en el tiempo. Asilo de la Virtud había nacido bajo la dirección de un cuerpo rector español, el Serenísimo Gran Oriente de España. Sin embargo, durante el período, terminaría regularizando su funcionamiento en el único cuerpo rector de la masonería cubana al cual pertenecía Fernandina: la Gran Logia Unida de Colón e Isla de Cuba.
El autor pintó el cuadro realista de la historia de la masonería en Cienfuegos en el siglo XIX. Un cuadro que viene a completar la sección de la historia de la masonería en Latinoamérica y en el Caribe.
Cienfuegos (1819-1902)
Ya es posible enterarse con rigor sobre la historia de la masonería en Latinoamérica. Este libro, del historiador cubano Samuel Sánchez Gálvez, de la Universidad de Guayaquil (Ecuador), entrega al curioso y al estudioso una investigación modélica sobre cómo se puede y debe obligatoriamente escribir la historia no solo de la masonería, puesto que es el foco que aquí ilumina, sino de la historia en general, independientemente del terreno analizado.
La masonería cienfueguera, en sus inicios, se vio inmersa en contradicciones internas dada la composición de los miembros de las logias Asilo de la Virtud, con una fuerte presencia española, y Fernandina de Jagua, con una mayoría de cubanos. En medio de esas diferencias surgieron en la ciudad otras logias, pero su funcionamiento fue corto en el tiempo. Asilo de la Virtud había nacido bajo la dirección de un cuerpo rector español, el Serenísimo Gran Oriente de España. Sin embargo, durante el período, terminaría regularizando su funcionamiento en el único cuerpo rector de la masonería cubana al cual pertenecía Fernandina: la Gran Logia Unida de Colón e Isla de Cuba.
El autor pintó el cuadro realista de la historia de la masonería en Cienfuegos en el siglo XIX. Un cuadro que viene a completar la sección de la historia de la masonería en Latinoamérica y en el Caribe.
Páginas: 364
Tamaño: 16 x 24 ctm